6 ene 2014

Acaba de amanecer, el sol ya salió y la primera persona que empieza a pasear por mi mente eres tú. El recordar estar parada frente a ti y poder sonreírte mirándote a los ojos hace que nuevamente mi corazón demuestre sus dotes de bailarín. Con cada respiro, me quitas las palabras de la boca, en ti he podido encontrar un lugar en el que quiero quedarme. Tu recuerdo está plasmado en mí como una fotografía. Y el estar ahí, sentados, gritando entre besos imaginarios todo el cariño que hay entre nosotros solo hace que aumente lo que siento por ti. Todos esos segundos a tu lado, en los que parecían ser eternos a la misma vez pudieron haberse esfumado en un beso, o tal vez dos si el tiempo estaba de nuestro lado.
                     Decirte que te quiero se me está empezando a quedar corto, es que es tan fácil quererte que cada segundo que pasa quiero estar a tu lado. Que me abraces y que me digas cosas lindas, mientras yo apoyada en tu hombro, me quedo callada, escuchando como los latidos de nuestros corazones se acomodan para sonar a un mismo ritmo, como si estuvieran hechos para latir juntos.